El Espectador 20 de
Marzo de 1965 - El Sacerdote Rafael
Cañadas Barroso del Colegio Carmelitano saluda
efusivamente a uno de los ciclistas del Equipo Español y de Radio Caracol. Hemeroteca de la Biblioteca Luis Ángel Arango Bogotá
Es propicia la ocasión del momento histórico con motivo
del exabrupto del cierre unilateral de la frontera por decisión del Presidente Nicolás Maduro, entre Venezuela y Colombia especialmente en
los ejes fronterizos de San Cristóbal, San Antonio, Ureña, Cúcuta,
y su zona de influencia hasta Pamplona. Para recordar la XV, Vuelta Ciclística de Colombia, considerado uno de los grandes eventos deportivos que mas apasionan a los colombianos y a los venezolanos de los estados andinos del Táchira, Mérida y Trujillo.
El Espectador 17 de
Marzo de 1965 Sección C - Hemeroteca de la Biblioteca Luis Ángel Arango Bogotá
Nuestros lectores se preguntaran
que tiene que ver el Colegio Carmelitano
y Pamplona con la XV Vuelta a Colombia. Muy sencillo
por una serie de características muy especiales, entre estas fue la primera vez que la referida vuelta a Colombia partía desde otro país ajeno
al territorio colombiano en el año de 1965.
Desde territorio venezolano en la Ciudad de San Cristóbal, Capital
del Estado Táchira a sesenta kilómetros de Cúcuta. Como un justo compromiso y reconocimiento a la Venezuela Andina donde el ciclismo
constituye junto al futbol una de
sus grandes pasiones como señaláramos
anteriormente.
A pesar de que ya para el año de 1956 la Vuelta a Colombia había pasado
por territorio ecuatoriano. En 1990 atravesó nuevamente el territorio
venezolano. Del Ecuador partió en los años de 1991 y
1993 de las ciudades de Quito y Tulcán, respectivamente. Para la década de
los 60 la moderna ciudad de San
Cristóbal ya había iniciado su
trasformación y contaba con unos 150.000 habitantes, situada a unos 1700 metros sobre
el nivel del mar y a unos novecientos
kilómetros de Caracas, la Capital de la República de Venezuela con la cual se comunicaba
a través de la carretera Panamericana.
La primera etapa o
prueba se soltó desde el Parque Sucre,
frente al gimnasio cubierto donde la noche anterior los humoristas colombianos
Los Chaparrines, Los Tolimienses y el uruguayo Hebert Castro hicieron una
función que colmo el referido Parque Sucre. Quienes habían sido promocionados
por Radio Caracol a fin de poder
recaudar los dineros necesarios para poder financiar el viaje del Equipo de
España que tenía un costo de ochenta mil pesos de esa época.
Con 102 Pedalistas
arranca hoy de Venezuela la XV Vuelta a Colombia el Espectador 17 de Marzo de 1965. Cortesía Hemeroteca
de la Biblioteca Luis Ángel Arango Bogotá
1965 Recorrido de la XV
Vuelta - El Espectador Hemeroteca de la Biblioteca Luis Ángel Arango Bogotá
El Tiempo 17-03-1965 Minutos antes de la Partida de la XV Vuelta a Colombia
Hemeroteca de la Biblioteca Luis Ángel Arango Bogotá
La señal de partida para los 102 pedalistas 89 colombianos,
09 mexicanos y 04 españoles de la XV Vuelta de Colombia la más
concurrida hasta ese entonces la cual se cumpliría en 17 etapas. Con un recorrido
de 2385 kilómetros, con
dos días de descanso uno en Bogotá y otro
en Medellín y que concluiría en Bogotá el 04 de abril de ese año. Fue dada el
día miércoles 17 de marzo de 1965 a las 09:00 horas por el Sr. Gobernador del Estado Táchira, Dr. Luis
Eduardo Santos Estrella, acto al cual asistieron las diferentes autoridades más representativas
de la región en lo civil, militar y eclesiástico.
En una primera etapa desde
San Cristóbal hasta la Ciudad Mitrada de Pamplona considerada como el Primer
Centro Estudiantil del Oriente
Colombiano, llevaba el
nombre de República de Venezuela en su homenaje debido a la fiebre ciclística
que había contagiado a la fanaticada
ciclística venezolana que había llegado
de Colombia. Y los dirigentes del ciclismo venezolano
en San Cristóbal anunciaban que el próximo mes de abril se iniciaría La
III Vuelta en Bicicleta a Venezuela y que habían tomado como modelo la organización de la vuelta a
Colombia.
17- 03 - 1965 Recorrido de
la Primera Etapa San Cristóbal - Pamplona. El Espectador Hemeroteca de la Biblioteca Luis Ángel Arango Bogotá
La primera etapa se cumplió a partir desde San Cristóbal a
1700 msnm, a lo largo de las poblaciones de Capacho a 2250 msnm; San Antonio
360 msnm; Cúcuta 308 msnm capital del Departamento Norte de Santander la cual
recibió a los ciclistas con una gran ansiedad lamentando que la prueba no se
pudiese detener; La Garita 768 msnm; El Diamante 960 msnm y Pamplona 2340 msnm, con un recorrido de 120 kilómetros.
18-03-1965 Paisaje Tipico Santandereano
La prensa nacional e internacional reseñaba el hermoso
panorama a recorrer “… el recorrido del tramo entre Cúcuta y Pamplona es verdaderamente
hermoso y sigue un asoleado camino por las orillas del Río Pamplonita… …al
llegar a la mitad del recorrido entre Cúcuta y Pamplona se deja atrás a
Bochalema… … La caravana llegara luego a
dos mil metros sobre el nivel del mar aproximadamente en medio de una
vegetación ya de clima frío, a la ciudad de Pamplona a la derecha, se
divisa el Pamplonita…”
Otra de la característica de la XV Vuelta de Colombia la constituían los cientos de jóvenes venezolanos que cursaban estudios de primaria
y bachillerato a la par de sus pares del estudiantado colombianos tanto en los
internados femeninos y masculinos de los Colegios Carmelitano, San José Provincial,
Niño Jesús de Praga, Gimnasio del Rosario, Salvador, Las Bethelemitas, Las
Terciarias, Santo Ángel, La Presentación, María Auxiliadora entre tantos otros que
escapan a nuestra memoria en la Ciudad Estudiantil
de Pamplona. Y ese día 17 de marzo
al ser declarado cívico la muchachada de los diferentes colegios se agruparon a
lo largo de las calles hasta la plaza Águeda Gallardo donde se encontraba la
meta para ver pasar a la caravana.
La otra característica la venían a constituir en sí mismo el
Colegio Carmelitano regentado por los
R.P Carmelitas de la Provincia Bética o Carmelitas Andaluces (calzados), hoy
Águeda Gallardo de Villamizar. Que se
unían o se alineaban además con el
equipo de ciclismo español integrado por
José Antonio Nomeñe; Jesús Vanzaneque;
Francisco Marti; Julio López de la Torre. Que representaban a España, los cuales eran patrocinados y pedaleaban a su vez por
Radio Caracol en ese entonces eran una incógnita por su experiencia en
Europa. Ya que en el año de 1957 el
español José Gómez del Moral, del equipo
español había resultado campeón de la vuelta a Colombia. Como otra anécdota de
la vuelta ciclística referente a los
carmelitas es sobre el ciclista Luis Alfaro que corría por la Virgen del Carmen.
El Tiempo 17-03-1965 Victoria de Cundinamarca
Lo cierto del caso es que
una vez concluida la primera etapa de la XV Vuelta de Colombia en
la que arribo en el primer Lugar el pedalista Glicerio Penagos, del Equipo de Cundinamarca a la meta en la Plaza Águeda Gallardo la principal plaza de Pamplona aplaudido y victoriado
por su población y estudiantado sin distinción
de nacionalidades y condición social, razas o religiones que demostraba cuan integrado se encontraban
las comunidades fronterizas del Departamento Norte de Santander y del Estado Táchira.
El equipo español promocionado por Radio Caracol a su vez fue recibido por
los sacerdotes Carmelitas de la Provincia Bética o Carmelitas Andaluces, en la
referida plaza Águeda Gallardo. Quienes procedieron en horas de la noche a
agasajar al equipo español en el Colegio Carmelitano, Junto a la comunidad española de la ciudad y a su alumnado especialmente los
internos.
Dos días mas tarde el 20 de marzo en la edición del diario El Espectador en la primera página de la Sección “C”, aparece una fotografía para la posterioridad del sacerdote español Rafael Cañadas Barroso saludando a uno de los integrantes del equipo español. Reseñándose en el Espectador, en el comedor de la referida institución :
“…SALÚDAME A LA MACARENA. – un sacerdote español conversa animadamente con Jesús Manzaneque, de la representación ibérica. Luego le aconseja: No te atengas a la virgen y corre…” y finalmente pregunto: ¿y los chatos de Manzanilla cuestan lo mismo todavía? …Anda, hijo me saludas a la Macarena…”
Al impulsar con los dedos las pequeñas bolitas esféricas de vidrio de colores que representaban diferentes competidores. Los jugadores demarcaban a lo largo de los patios y en contacto directo con la tierra o el suelo con canales o pequeñas zanjas con obstáculos subidas, bajadas, desniveles, saltos o abismos que representaban las carreteras. El juego se decidía entre los diferentes jugadores o competidores hasta cinco o mas que superaran los obstáculos al impulsar con los dedos la mayor distancia con la metra o canica lo más lejos posible hasta atravesar la meta volantes y así cada jugador hasta atravesar la linea de llegada.
Dos días mas tarde el 20 de marzo en la edición del diario El Espectador en la primera página de la Sección “C”, aparece una fotografía para la posterioridad del sacerdote español Rafael Cañadas Barroso saludando a uno de los integrantes del equipo español. Reseñándose en el Espectador, en el comedor de la referida institución :
“…SALÚDAME A LA MACARENA. – un sacerdote español conversa animadamente con Jesús Manzaneque, de la representación ibérica. Luego le aconseja: No te atengas a la virgen y corre…” y finalmente pregunto: ¿y los chatos de Manzanilla cuestan lo mismo todavía? …Anda, hijo me saludas a la Macarena…”
El Tiempo 18-03-1965 Diez y Siete salida... de Pamplona a Bucaramanga
Al otro día se da la partida para la segunda etapa Pamplona Bucaramanga 
El Espectador 19-03-1965 Etapa Pamplona Bucaramanga
El Espectador 19-03- 1965 Etapa Pamplona Bucaramanga subiendo el Cerro Grande
En el Colegio Carmelitano entre los juegos tradicionales que
efectuaban los niños de primaria y los adolescentes de secundaria cada vez que se iniciaba la vuela a Colombia. Una gran parte de la muchachada del colegio procedía
a jugar con las metras(Venezuela) o canicas (Colombia) a la vuelta a Colombia en los diferentes
patios.
Al impulsar con los dedos las pequeñas bolitas esféricas de vidrio de colores que representaban diferentes competidores. Los jugadores demarcaban a lo largo de los patios y en contacto directo con la tierra o el suelo con canales o pequeñas zanjas con obstáculos subidas, bajadas, desniveles, saltos o abismos que representaban las carreteras. El juego se decidía entre los diferentes jugadores o competidores hasta cinco o mas que superaran los obstáculos al impulsar con los dedos la mayor distancia con la metra o canica lo más lejos posible hasta atravesar la meta volantes y así cada jugador hasta atravesar la linea de llegada.
Los Editores 12 de septiembre de 2015
Bibliografia
Diario El Espectador
El Espectador 17-03-2015
El Espectador 18-03-2015
El Espectador 19-03-2015
Diario El Tiempo
El Tiempo 17-03-1965 Diez y Siete salida
El Tiempo 18-03-2015
Victoria de Cundinamarca
El Tiempo 19-03-2015
El Espectador 20-03-2015 Saludame a la Macarena Sacerdote Español Rafael Cañadas Barroso
Hemeroteca de la Biblioteca Luis Ángel Arango Bogotá
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